Leyendo el título del post de hoy, ya debes intuir que aunque utilizamos muchas veces estos 2 verbos de forma sinónima, no son lo mismo. Seguro que conoces a alguien que, a pesar de tener su casa desordenada y todo aparentemente hecho un caos, sabe perfectamente dónde está cada cosa y encuentra cada elemento en menos de un minuto. Ordenar y organizar son dos conceptos compatibles, complementarios pero no inseparables. Mira si no los siguientes ejemplos:
  • Puedo tener un cajón lleno de camisetas desordenadas, mal colocadas pero perfectamente organizadas porque sé que todas las camisetas están allí, en el mismo cajón y por tanto, cuando las necesite sabré rápidamente donde encontrarlas. Podría además, tenerlas bien plegadas y ordenadas por colores.
  • Puedo tener un archivador con todos los papeles del despacho ordenados, perfectamente ordenados. pero si no le doy un sentido, si no tengo un sistema para diferenciar las facturas, los apuntes o de las cosas pendientes, no me será un sistema efectivo y por tanto organizado.
Vamos a ver cómo se diferencian:

Organizar

Cuando organizamos creamos sistemas, buscamos soluciones utilizando la creatividad para simplificar nuestra vida, para hacernos lo fácil, para darle un sentido. La Organización está más relacionada con la eficiencia, la eficacia y la productividad. En dedicar menos energía mental en encontrar las cosas. Cuando organizamos, damos un sentido a cómo pongo las cosas. Tal y como explica José Miguel Bolívar a su Blog Óptima infinito, cuando organizo establezco correspondencias entre el qué y el dónde, mientras que cuando ordeno aplico al cómo.

Cuando organizo decido «qué» pongo «on». Cuando ordeno decido «como» pongo «qué».

Ordenar

Cuando ordenamos aplicamos secuencias y patrones, decidimos como colocamos las cosas y le damos un sentido más estético, de «limpieza visual». El orden está más relacionado con la estética, con la intuición y en hacernos la vida más agradable.

‘El orden es útil cuando contribuye a la organización, pero la orden por el orden es irrelevante para la efectividad

José Miguel Bolívar – Blog: Ótima infinito

Y tú, ahora que ya sabes cómo diferenciarlas, ¿te consideras una persona ordenada, organizada o ambas?